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LA REUNIÓN DE ANCHO
Anoche se reunieron los vecinos de Ancho para oír las explicaciones de la comisión encargada de gestionar la independencia de aquel barrio.
Presidió el Sr. Echeverría (D. Antonio), y el señor Sánchez (D. Mariano), en nombre de la comisión, expuso, poco más o menos, lo siguiente:
“Vamos a dar cuenta de las gestiones que hemos practicado en cumplimiento del encargo que se nos confirió en la última reunión.
Hemos consultado a distinguidos jurisconsultos sobre la posibilidad de recabar la independencia del barrio; y después de detenido estudio, se nos ha informado que no es posible entablar una demanda gubernativa en ese sentido, pues la ley exige que para que un barrio pueda declararse independiente, tenga lo menos 2.000 habitantes, y no encontrándonos en esas condiciones, habría que acudir a las Cortes pidiendo la derogación de esa ley, lo que, si no imposible, es difícil de conseguir, y requiere una tramitación bastante larga y costosa.
Siendo el objeto principal evitar la división del barrio, por las dificultades que del deslinde han de surgir, nos han indicado un medio sencillo y factible, dentro de las condiciones de la ley, cual es solicitar la anexión a un municipio colindante; pero como la comisión no se halla autorizada para tratar sobre este punto, lo someterá a la reunión para que resuelva lo que estime más conveniente sobre el particular.
Se han hecho también insinuaciones a esta comisión, por parte del Ayuntamiento de Alza, para que manifieste a esta reunión que, caso de que el barrio solicitara anexionarse a él, estaría dispuesto por su parte a establecer desde luego las escuelas, habilitar un local que reúna mejores condiciones higiénicas para el culto mientras pueda edificar una capilla en el barrio, y atender a los servicios públicos según lo permitan los recursos de la población.
Los individuos de la Comisión, por su parte, creen que, puesto que no se hallan en condiciones para poder administrarse independientemente, sería preferible la anexión a Alza, evitando de ese modo la división del barrio.”
Se abrió discusión acerca del asunto.
El Sr. Goicoa dijo que, a su juicio, no podía conseguirse la anexión del barrio a Pasajes de San Juan ni al de San Pedro, ni a Alza, al no tener para ello grandes influencias, que sólo pueden encontrarse en San Sebastián.
El Sr. Zavaleta expuso igual creencia, y la de que Ancho llegaría a ser floreciente únicamente si se anexionaba a San Sebastián. Censuró que la comisión hubiese expuesto una solución, porque con ello arrastraba a los demás a adoptarla.
Prodújose un incidente entre los Sres. Maleprade y Goicoa, sosteniendo aquel que, por tratarse de la anexión de Ancho a uno de los Pasajes, a Alza o a San Sebastián, encuentra preferible lo malo conocido a lo bueno por conocer.
Intervinieron en la discusión otros señores, sin añadir nada nuevo.
El Sr. Goicoa manifestó que habiendo fallado el Consejo de Estado que Ancho pertenece a Pasajes, no hay más remedio que conformarse con la sentencia.
El Sr. Maleprade excitó a los concurrentes a que permanezcan unidos, y acuerden a cuál pueblo quieren anexionarse, pues son varios los que pretenden a Ancho, que produce, y los otros se mueren de hambre.
Se puso a votación el punto, dando el siguiente resultado:
Acordaron anexionarse a Alza, 99, y a San Sebastián, 1.
El Sr. Zavaleta protestó contra el acuerdo.
Con lo que se levantó la sesión.
La comisión continuará gestionando, después de recabar las firmas de los demás vecinos, para intentar el logro de los deseos del barrio.
