Altza XIX. mendeko kroniketan

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Donostia eta Irun arteko ziklista lasterketa

La Voz de Guipúzcoa – 1896-06-07

Apuntes Ciclistas
La carrera de hoy

Si el tiempo no lo toma a mal y se mantiene sin llover de suerte que las máquinas puedan rodar sin peligro de caída para los corredores, esta tarde se verificará la carrera San Sebastián, Irún, San Sebastián en la forma que por haberla detallado el último jueves no repetimos hoy.

Los corredores son doce y todos o casi todos llevarán entrenadores, así es que para los espectadores el atractivo mayor de la fiesta estará más allá de Ategorrieta, pues en este barrio tomarán los carreristas los entrenadores, y como es probable que vayan juntos todos resultará un pelotón de veinte o más velocipedistas.

A la vuelta también es el mejor punto de vista la carretera entre Ategorrieta y Miracruz, pues los corredores bajarán embalando y para los que lleguen juntos, en esa pendiente harán el esfuerzo decisivo de su triunfo.

Las autoridades han adoptado todo género de precauciones, principalmente de vigilancia para que ninguna mano intencionada pueda poner dificultades a los corredores.

El que tal cosa intentase —que no es de esperar— sería seguramente castigado.

Nadie es profeta en su tierra, así es que no seremos nosotros los que nos metamos a vaticinar el triunfo.

Sin embargo, diremos que entre los aficionados reina impresión favorable para Labadie, Blasco y Desoye, sin que esto sea desconocer el mérito de los demás.

Como dato curioso diremos que hay una apuesta pendiente a favor de determinado corredor —y éste la ignora— sobre si hará el record, salvo accidente, en una hora diez minutos.

Es indudable que si el tiempo es bueno, la fiesta será animadísima.

 

La hora ha sufrido una indispensable variación. Saliendo los corredores a las cinco (hora de San Sebastián, que es poco más o menos las cinco menos diez en la estación) podrían encontrar cerrado el paso nivel de Irún, por salir un tren de aquella estación a las 5,35.

Para evitar esta eventualidad se adelanta la carrera media hora.

La salida será, pues, a las cuatro y media en punto.

 

La comisión de recepción de ciclistas forasteros e invitados, estará formada por los señores Monigatti (D. L.) y Múgica (D. L.).

El jurado de Irún estará presidido por el vice-cónsul de la U.V.E. en aquella villa, D. Ramón Iglesias auxiliado por Sres. D. V. Marimorena, P. Claverie, R. Sarriá, H. Bidegaray, A. Fernández y delegado de San Sebastián.

La carretera desde Gainchurizqueta a dicha villa quedará cubierta de jueces de ruta, por los entusiastas compañeros de pedal de Irún y establecido un inteligente sistema de señales con los que aquellos por medio de banderines avisarán al jurado la proximidad de cada corredor.

Sabemos que reina allí extraordinaria animación con motivo de esta carrera que constituye una novedad en la villa, y que menudean las apuestas y los comentarios más o menos aventurados.

 

Los corredores llevarán en el brazo derecho una banda blanca con el número de orden de su inscripción que es el siguiente:

1.º R.Schiitz, de San Sebastián.

2.º B. Desoye, de idem.

3.º M. Labadie, de idem.

4.º G. Llorente, de idem.

5.º W. Blasco, de idem.

6.º G. Gal, de Irún.

7.º N. Sistiaga, de idem.

8.º J. Marchant, de San Sebastián.

9.º G. Jude, de idem.

10.º P. Moral, de idem.

11.º C. Odriozola, de idem.

12.º A. Casadentro, de Tolosa.

Los entrenadores de cada cual llevarán en el brazo izquierdo una cinta distintivo del color elegido por su corredor.

 

El juez de poteau en Gainchurizqueta será D. Buenaventura Soroa, auxiliado por D. R. Ituarte, quienes establecerán la meta de llegada al alto de dicho punto para asignar al primer carrerista que lo trasponga el premio concedido por el Casino de la Amistad de Irún, al igual del primero que llegue al viraje de dicha villa en el kilómetro 480, el otro premio también donado por el Círculo de Recreo de Irún, pero siempre que ambos terminen la carrera dentro del tiempo máximo concedido 1h. 45 m.

 

Se han dirigido suplicatorios a las autoridades de los pueblos de travesía, etcétera, para que hagan lo posible a fin de que la carretera se halle desembarazada de perros y que todo vehículo así como todo ciclista bien cruzarse con los corredores conserve la derecha de la respectiva marcha.

Los jueces de ruta ejercerán vigilancia especial sobre este punto e invitarán a los conductores del tranvía a quedar parados en los cruces, en la misma vía y en línea recta para lo cual se ha tratado de recabar una orden especial de la dirección de la empresa que así lo ha ofrecido atentamente.

CICLÓFILO