Desaparición

Ambas ermitas fueron fundadas por iniciativa de don Juan de Yerobi, vicario de la Villa.

San Jerónimo se proyecta en 1552 y se destruye en 1777 por causa de un incendio.

Santa María Magdalena del Desierto se erigió en 1541 y su cese como tal en 1780.

En la Junta General de Tolosa de julio de 1769 se trata sobre la extinción de las ermitas de su distrito que estuviesen en despoblado. Durante ese mes y el siguiente los municipios guipuzcoanos informan de su situación en este tema. Rentería no está dispuesta a renunciar a su querida ermita de la sierra, pero la oposición del cabildo a acudir a las letanías, la desaparición de los ermitaños, el lamentable estado del edificio y las vacías arcas municipales  por la obra en la Parroquia, acabaron con la idea de conservarla.